La fractura de cadera es un problema predominante en personas de la tercera edad, debido a la fragilidad que presentan sus huesos, ya sea por desnutrición, osteoporosis u otra causa. Aproximadamente 1.6 millones de fracturas de cadera ocurren a nivel mundial cada año y los números están en ascenso, con cifras estimadas de 4.5 a 6.3 millones para el año 2050.

Después de la cirugía de fractura de cadera, la mayoría de los pacientes experimentan un decremento en la función e incremento en la morbilidad. Debido a la gravedad de este problema, se ha planteado una hipótesis que afirma que el uso de los esteroides anabólicos, los derivados sintéticos de la hormona masculina testosterona, en combinación con el ejercicio ayudan a la recuperación de la fractura de cadera.

Se realizó un estudio con 154 mujeres que habían tenido cirugía por fractura de cadera. Dos experimentos compararon el uso de esteroides anabólicos con intervención nutricional, contra el control (placebo) . En el primer experimento, se compararon las inyecciones anabólicas dadas cada 3 semanas por 12 meses, combinadas con suplemento diario de vitamina D y calcio, contra calcio por sí solo. El otro experimento consistió en comparar las inyecciones de esteroides anabólicos cada 3 semanas por 6 meses, más una ración de proteína diaria, contra control en 40 mujeres de la tercera edad. Ambos experimentos resultaron en un mejor efecto cuando se administraron esteroides anabólicos más el suplemento diario.

Dado que con una combinación de esteroides anabólicos y una intervención de suplementos nutricionales, los resultados fueron prometedores, las futuras investigaciones se concentrarán en evaluar y comercializar esta combinación.

Autor: Carlos Elizondo – Editor: Manuel Paredes

Bibliografía: