EMISlife 12

Conoce a la EMIS de la semana, Luisa Pérez (EMIS 5)

“Lo que se necesita para conseguir la felicidad, no es una vida cómoda, sino un corazón enamorado.” -San José María

¿Qué haces en tus tiempos libres?

• En mis tiempos libres me gusta ver series, me encanta ver atardeceres, pasar tiempo con mi novio, mis amigos en otras rotaciones y con mi familia que casi no lo veo.

¿Qué es lo que más te gusta de estar en clínicas?

• Lo que más me gusta, disfruto y me hace despertarme cuando estoy muy cansada es ir a platicar con los pacientes y tomarme el tiempo de escucharlos ya que a veces es lo que más necesitan, ser escuchados. Considero muy importante darles un buen trato y tratar de explicarles lo más que se pueda sobre lo que les está sucediendo en ese momento para que ellos sientan cercanía con la enfermedad y tanto ellos como el médico ayuden a ir sanando lo más que se pueda esa enfermedad. El hecho de que el paciente realmente entienda los cuidados que requiere hace que cambie su chip en la cabeza y ayuda mucho para su bienestar.

¿Cuál es tu meta en la vida?

• Mi meta es tratar de lograr un equilibrio en todas las esferas de mi vida. En cuanto a la medicina, mi meta es llegar a tener una conexión profunda con mis pacientes, para que cuando vengan conmigo salgan de la consulta distintos y tengan una nueva visión aunque no se arregle el problema en ese momento. Mi más grande meta es poder dejar una huella, un pedacito de mi en cada persona que conozco.

¿Cuáles son los valores que consideras más importantes en un estudiante de medicina?

• Respeto, responsabilidad, honestidad, amor y espíritu de servicio por que a los pacientes hay que tratarlos con cariño.

¿Qué es lo que más te gusta de la escuela?

• Me gustan muchas cosas de la escuela, pero lo que más me gusta y lo que siento que hace diferencia con otras escuela es la oportunidad que nos da de tratarnos entre estudiantes, maestros-estudiantes, médicos externos-estudiantes, es decir, la red que se forma de comunicación y apoyo logra hacer que se pierdan los niveles de extremos que nos ha puesto la sociedad como futuros médicos a lo largo de los años y se convierte en un trato mucho más humano. Al final terminas con una red muy grande y favorable de compañerismo, con tus amigos, médicos y residentes y el ambiente que se genera es muy favorable para un desarrollo integral y además promueve el trabajo en equipo multidisciplinario.