La cantidad de conocimiento médico continúa expandiéndose exponencialmente y cada nueva generación de estudiantes de medicina se enfrenta a un reto mayor en su formación como profesional holístico de la salud. Debido a esta constante exigencia, el presente estudio <1> busca determinar la manera en que la cantidad y tasa de lectura afecta la capacidad de los estudiantes de medicina de realmente comprender la información asignada en su plan de estudios.

Los autores analizaron la cantidad de textos asignados durante 71 semanas en 12 módulos del plan de estudios de Ciencias Básicas Preclínicas de la “Mercer University School of Medicine”, en el año académico 2009-2010. El proceso de lectura se categorizó en 5 niveles basados en la cantidad de texto que un estudiante puede leer; por lo tanto, la clasificación está hecha en base a palabras leídas por minuto (PPM) <2>.

Contexto: Al término de la preparatoria los alumnos, en general, se encuentran en un nivel de lectura 3 (300 PPM), pero al momento de ingresar a la escuela de medicina, por el hecho de que los textos científicos incluyen nuevas palabras y conceptos para los lectores novicios, se registra una tendencia a disminuir su nivel de lectura. Esto se explica debido a que los alumnos ahora deben aprender y memorizar ideas clave, así como releer frases u oraciones completas <3>. Cabe mencionar que el nivel de lectura 4 (450 PPM) se aplica a los lectores que escanean la información y el nivel 5 (600 PPM) corresponde a los que la hojean; por tanto, se concluye que la comprensión de lectura es inversamente proporcional al nivel de la misma <2, 4>.

Método: Se calculó el número de páginas, y la cantidad de palabras incluidas en las mismas, de los textos asignados a los estudiantes de Ciencias Básicas Preclínicas de la “Mercer University School of Medicine”, durante el ciclo escolar 2009-2010. Se realizó una encuesta vía internet a 104 alumnos de 1ro a 4to año, en la cual se cuestionó acerca del porcentaje de textos asignados que completaban o terminaban de leer, la cantidad de horas dedicadas a la lectura escolar cada día y la cantidad de páginas que podían leer por hora.

Resultados: Analizando los textos asignados por la facultad de medicina, se calculó que estos contienen un promedio de 558 palabras por página, 7 letras en cada palabra y 20 palabras por oración. Se determinó que la universidad asignó 29, 239 páginas de lectura en el total de los 12 módulos del plan de estudios correspondiente a 71 semanas. Tomando en cuenta que los estudiantes suelen asignar la última semana de los  módulos a un repaso general antes del examen, se calcula que para que los alumnos puedan terminar completamente las lecturas asignadas, deben leer 496 páginas por semana durante 59 semanas (12 semanas de exámenes y repaso).

Los resultados de las encuestas son los siguientes:

Horas de lectura diarias

No. (%) de estudiantes

2-4 horas

15%

5-7 horas

56%

8 o más horas

29%

Promedio de horas de lectura diaria: 6 horas

 

Cumplimiento de lectura de la lista de textos asignada

No. (%) de estudiantes

100% (terminó de leer todos los textos)

14.4%

90% de la lista

21.1%

70% – 90% de la lista

51%

50% – 70% de la lista

13.5%

 

No. de páginas leídas por hora

PPM (palabras por minuto)

No. (%) de estudiantes

<6

<50

13%

7-12

51-100

53%

13-18

101-150

17%

19-24

151-200

15%

>25

>201

2%

Recordando que las semanas utilizadas para repaso pre examen hacen un total de 12 semanas (curso con una duración de 71 semanas), para terminar de estudiar todas las lecturas asignadas, el estudiante de medicina tendría que leer durante 59 semanas, de 28 a 41 horas a la semana a una velocidad de 150 o 100 PPM respectivamente. Debido a que el promedio de horas de lectura diaria es de 6 horas, los alumnos necesitarían leer de 5 a 7 días a la semana para poder completar satisfactoriamente la totalidad de su lista de textos asignados.

Discusión: En base a los resultados obtenidos, se afirma que un estudiante de medicina promedio (83%), tiene un nivel de lectura de 1. Los autores afirman que este resultado se explica fácilmente debido al alto grado de dificultad encontrado en el vocabulario y contenido de los textos médico-científicos.

Se expresa que los estudios, por medio de los cuales se obtuvo la clasificación de niveles de lectura, fueron basados en textos no científicos y, por lo tanto, es necesario mencionar que, comparando el presente estudio con otros efectuados anteriormente en lectores de textos de un alto grado de dificultad, se ha publicado que los estudiantes de leyes, tienen un promedio de lectura de 198 PPM, mientras que los estudiantes novicios de la misma profesión tienen uno de 97 PPM <5>.

La lectura activa el proceso cognitivo y, de acuerdo con la teoría de carga de entrada cognitiva, se sabe que los lectores tienen una memoria de trabajo limitada, en la que sólo pueden retener de 5 a 9 elementos de  nueva información proveniente de vías sensoriales. Los lectores perderán casi toda la información leída después de 20 segundos a menos que estén releyéndola. La memoria a largo plazo reduce la carga de entrada de la memoria de trabajo a través del uso de esquemas cognitivos que organizan el conocimiento y facilitan el razonamiento utilizando diversos elementos de información simultáneamente. Los “lectores novicios” tienen que atravesar diferentes ciclos de aprender-olvidar (memoria de corto plazo) antes de que la nueva información pueda entrar en su memoria de largo plazo, mientras que los “lectores expertos” ya poseen cuantiosos términos que forman esquemas cognitivos a los que pueden recurrir rápidamente para irlos aplicando mientras se desarrolla la lectura. Los autores aseguran que los directores o profesores de medicina esperan que los estudiantes lean y comprendan una gran cantidad de nueva información sin realmente considerar el tiempo que estos tardan en procesarla y guardarla <6>.

Una técnica adecuada de aprendizaje, empleada por estudiantes considerados como “analizadores profundos”, es la utilización de procesos de aprendizaje basados en la correlación de conceptos y hechos. Los “analizadores profundos” buscan evidencia práctica de la aplicación de nuevos conceptos aprendidos y los integran y relacionan con lo teóricamente aprendido. Aunque la facultad de medicina espera que asignando una gran cantidad de lectura todos sus estudiantes se conviertan en “analizadores profundos”, la realidad es que la mayoría adopta estrategias superficiales de aprendizaje con el único objetivo de aprobar exámenes, lo cual ocasiona acumulación de déficits intelectuales que tendrán que ser pagados en algún momento, exigiendo a los estudiantes aún más tiempo de lectura y dedicación a su formación <7>.

Es importante mencionar que el estudio se enfocó a analizar el tiempo de lectura de páginas con sólo texto y se considera que cuando, dentro del mismo, se encuentra contenido no textual (eg. tablas, gráficas, figuras), el tiempo de lectura incrementa aún más y el nivel de lectura disminuye. Los autores sugieren que los estudiantes de medicina deben elegir entre no completar toda la lista de lectura asignada o sacrificar actividades extracurriculares para poder dedicar más tiempo a su lectura y, por lo tanto, ser capaces de comprender adecuadamente toda la información presentada.

Es un hecho que el plan de estudios de la carrera de medicina reta la capacidad de todos y cada uno de sus estudiantes, debido a esto, es necesario que los alumnos estén conscientes de las consecuencias y requerimientos que su formación profesional implica porque de esta manera podrán tomar decisiones mejores e informadas sobre sus métodos de aprendizaje y  la cantidad de tiempo que dedican al mismo. Los autores proponen recomendaciones que facilitarán los procesos cognitivos de los estudiantes de medicina: los profesores deben formular objetivos de aprendizaje concisos y delimitados, señalar los libros de lectura recomendados, disminuir la cantidad de lectura asignada tomando en cuenta el promedio y tasa de lectura diaria de la mayoría de los estudiantes (eg. 180 páginas/semana = 15 horas de lectura/semana a una tasa de lectura de 100 PPM = 3 horas diarias de lectura durante 5 días de la semana) y finalmente se propone que los profesores provean de casos clínicos adecuados que ayuden a demostrar la práctica de la teoría aprendida <1>.

Autor: Fernanda García 

Bibliografía:

  • Klatt EC, Klatt CA. How much is too much Reading for medical students?. Academic Medicine. 2011;86(9):1079-1083
  • Carver RP. Reading rate: Theory, research, and practical implications. J Reading. 1992;36:84–95.
  • Duggan GB, Payne SJ. How much do we understand when skim reading? Paper presented at: Conference on Human Factors in Computing Systems; April 22–27, 2006; Montreal, Quebec, Canada. http://doi.acm.org/10.1145/1125451.1125598. Accessed May 20, 2011.
  • Carver RP. Reading Rate: A Review of Research and Theory. New York, NY: Academic Press; 1990:155–165.
  • Lundeberg MA. Metacognitive aspects of reading comprehension: Studying understanding in legal case analysis. Read Res Q. 1987;22:407–432.
  • Van Merrienboer JJ, Sweller J. Cognitive load theory in health professional education: Design principles and strategies. Med Educ. 2010;44:85–93.
  • Satran L, Harris I. The relationship of examinations to amount of student reading: The examination as symbol. Med Teach. 1988;10:169–174.