Te presentamos a la EMIS de la semana, Daniela Sánchez.

¿Qué fue lo más difícil en tu transición de preparatoria a carrera?
Tuve tres principales retos en esta transición:
El primero, separarme de mi familia e ir a una ciudad desconocida, al principio fue difícil pero ahora veo en Monterrey mi segunda casa y en mis amigos he encontrado mi segunda familia. El segundo, fue encontrar un método de estudio ideal para mí y encontrar un balance entre el estudio y mi desarrollo personal. El tercero fue dejar de participar en actividades artísticas, lo cual disfrutaba mucho en la prepa. Lo que más atesoro de estos retos es que con cada uno he forjado mi carácter y he tenido la oportunidad de crecer y aprender.

¿Por qué decidiste estudiar medicina?
La primera vez que tuve noción de un quirófano fue cuando tenía 4 años y creí no querer nunca estudiar Medicina porque sentí “miedo”. Después me di cuenta de que el sentimiento no era precisamente miedo, sino intranquilidad de no poder hacer nada por las personas que se veían vulnerables en el hospital. Sumado a eso, desde la primaria me di cuenta de que me gustaban mucho las ciencias biológicas y de la salud. Fue así como centré mi interés en estudiar lo que considero lo más asombroso: la vida, su evolución y la relación que tienen estas con el cuerpo humano. Soy firme creyente de que el único compañero eterno que tenemos es nuestro cuerpo y es a través de él que podemos cumplir nuestros sueños, por lo que debemos buscar siempre la manera de cuidarlo y me encantará poder aplicar mis conocimientos para ayudar a que mis pacientes mantengan su salud y que así puedan cumplir sus sueños.

¿Qué especialidad te gustaría tener?
Creo estar 100% segura de que me gustaría hacer algo relacionado con pediatría, me parece muy interesante interactuar y convivir con niños, además de que varias personas me han dicho que esa convivencia me es natural. Siento que en general es difícil de vez en cuando lidiar con niños y con la preocupación de sus papás, por lo que me gustaría explotar esa cualidad que creo tener; sin embargo estoy convencida de que será en el internado cuando podré decidir por completo el camino que quiero seguir al vivenciar en carne propia las rotaciones por las diferentes especialidades.

¿Cuál es tu meta en la vida?
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él mana la vida.” (Pr 4:23)
Esta cita bíblica me recuerda lo que es esencial: cuidarme, ayudarme y “curarme” a mí misma cuando sea necesario para poder ofrecer lo mismo a los demás (pacientes y personas en mi vida). Definitivamente hay muchas cosas que quiero lograr y por las cuales trabajo día a día pero mi meta es que a pesar de todo lo que haga, pueda cuidar de mí misma y poner en primer lugar mi plenitud, porque si no me siento bien y en paz, entonces quién va a festejar el logro de cada una de mis metas.

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