Muchos padres de familia y autoridades han expresado preocupación por el tiempo que los niños en edad temprana emplean viendo la televisión. Varios estudios han explorado la influencia de este medio en los infantes e incluso se han diseñado programas y canales específicos para niños en edad pre- escolar (ej. Nick Jr., Disney Jr., Discovery Kids, etc). Sin embargo, un estudio publicado en el 2011 revela que el impacto que ésta puede tener en los niños, tiene mucho que ver con la estructura de los programas de televisión a los que están expuestos. Caricaturas de ritmo muy rápido como Bob Esponja, demuestran producir efectos negativos inmediatos en la función cerebral de los niños, la discusión entre autoridades de salud continúa sobre la trascendencia de estos efectos en el desarrollo cognitivo.

En el 2011, un niño en edad pre escolar veía aproximadamente 90 minutos de televisión al día (Christakis, 2011), un estudio publicado en el mismo año en la revista académica Pediatrics, revela una posible relación entre la exposición temprana a la televisión y deficiencias en el desarrollo de las funciones ejecutivas en los infantes. Estas funciones, son una serie de habilidades que incluyen el span atención, la memoria inmediata, la auto regulación, entre otras.

Una caricatura se puede clasificar en tres grandes clases: de ritmo rápido, de ritmo moderado y de ritmo lento, esta clasificación tiene que ver con la velocidad en la que se cambian los cuadros y se pasa de un plano visual a otro. La caricatura popular Bob Esponja, se caracteriza por tener un ritmo particularmente rápido junto con cortes de toma agresivos, lo que produce un fenómeno conocido como sobre estimulación sensorial en el espectador (Lillard & Peterson, 2011). Los efectos de esta sobre estimulación han llamado la atención de autoridades médicas a partir de un aparente aumento en la prevalencia de trastornos de atención y en el 2011 se condujo un estudio en la Universidad de Virginia que demostró los efectos negativos a corto plazo derivados de esta exposición.

El estudio analizó el desempeño de 60 niños de 4 años de edad en actividades que se utilizan clásicamente para medir el desarrollo de la función ejecutiva. Los niños que se sometieron al estudio fueron divididos en tres grupos a los que se les presentaron tres diferentes estímulos previos a las actividades de medición, el grupo uno vió 9 minutos de la caricatura Bob Esponja y otras de ritmo similar, el grupo dos vió 9 minutos de un programa educativo y el grupo tres dibujó libremente 9 minutos antes del ejercicio. Las actividades de medición de la función ejecutiva a las que fueron sometidos incluyen exámenes estandarizados que miden la capacidad para seguir instrucciones, el nivel de memoria de trabajo y la capacidad para esperar por una recompensa. Los resultados de los tres grupos fueron cuantificados en relación al desempeño de los niños y fueron comparados.

Consistentemente, los niños que vieron la caricatura de ritmo rápido previo a las examinaciones, se desempeñaron de manera bastante inferior a los demás grupos, siendo el grupo con mejores resultados, el que dibujó libremente antes de las actividades de medición. Los resultados de cada prueba se pueden observar en la gráfica que se presenta a continuación .

Aunque este estudio solo prueba una disminución en la función ejecutiva inmediata después de ver una caricatura de ritmo rápido, sus efectos podrían trascender en el desarrollo del niño a largo plazo(Lillard & Peterson, 2011). Se hipotetiza que el aumento en los trastornos de atención, podría tener que ver con la exposición cada vez más temprana a la sobre estimulación sensorial de los programas de televisión (Christakis, 2011).

Por otro lado, el estudio antes discutido demuestra que aunque los efectos inmediatos en la función ejecutiva de la estimulación por programas de televisión educativos son significativamente menores que los de caricaturas de ritmo rápido, también son negativos cuando se comparan con los de otros estímulos creativos que excluyen la expectación de programas de televisión, como dibujar.

De esta manera se puede concluir que aunque la evidencia es limitada, podría existir una relación negativa entre el desarrollo cognitivo de los niños y la expectación de programas televisivos, particularmente lo de ritmo muy rápido como Bob Esponja. Por lo anterior, la revista Pediatrics recomienda limitar significativamente la exposición de los niños, especialmente aquellos en edad preescolar, a la televisión, inclusive a los programas educativos. Se recomienda involucrar a los niños en actividades creativas con el dibujo, la interacción con otros niños y los juegos de manuales y tradicionales para contrarrestar el tiempo invertido para ver la televisión (Christakis, 2011).

Autor: Olga Santín – Editor: Gina González

Bibliografía:

  • Lillard, A., & Peterson, J. (n.d). The Immediate Impact of Different Types of Television on Young Children’s Executive Function. Pediatrics, 128(4), 644-649.
  • Christakis, D. (n.d). The Effects of Fast-Paced Cartoons. Pediatrics, 128(4), 772-774.